Cuando íbamos a empezar este bloque,
yo me pregunte que sería eso de los textos folclóricos, algo que ya explicare
un poco más adelante. Pero tuve más confusión cuando empezamos a decir títulos
de películas de Disney y la mayoría de ellas provenían de cuentos o novelas
folclóricos que ni siquiera eran infantiles, muchas de ellas eran guiones
cinematográficos creados explícitamente para niños. Un ejemplo de ellos es:
CUENTOS
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NOVELA
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GUIÓN
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CAPERUCITA ROJA
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BAMBI
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EL REY LEÓN
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LOS 3 CERDITOS
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EL LIBRO DE LA SELVA
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TODD Y TOBY
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LA PRINCESA Y LA RANA
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EL JOROBADO DE NOTRE DAMM
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LA DAMA Y EL VAGABUNDO
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RAPUNZEL
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DUMBO
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LA BRUJA NOVATA
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ALADDIN
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ROBIN HOOD
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MARY POPPINS
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BLANCANIEVES
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TARZÁN
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BICHOS
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LA BELLA DURMIENTE
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PINOCHO
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ANTZ
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PETER PAN
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ALICIA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS
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CARS
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LA BELLA Y LA BESTIA
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…
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…
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A lo que voy, los textos folclóricos
son aquellos que no tiene autor, bueno en realidad si tienen, el autor es el
propio pueblo que los ha transmitido tanto horizontal como verticalmente, lo
que quiero decir con esto es que estos textos han traspasado fronteras y se han
ido contando de generación en generación a lo largo de mucho tiempo, por ello
es muy posible que existan diferentes versiones de un mismo texto inicial.
Como he dicho al principio, la mayoría
de estos textos ni siquiera son infantiles, simplemente se contaban en el seno
familiar donde los podía oír cualquier miembro de la familia, ya fuesen niños,
mayores o abuelos, ya que se contaban para entretener. Quiero destacar que
estos textos son adaptativos al aula, es decir, que como maestros podemos
adaptar los cuentos a nuestro grupo de alumnos, al fin y al cabo sería una
versión más de las tantas que ya hay, y de esta forma convertirlos al público
infantil.
Estas historias son reflejo de las
épocas por las que han pasado a lo largo de los siglos, por lo que reflejan
sueños, deseos o ilusiones (encontrar el amor, recuperar la salud, conseguir
dinero o poder…) o temores de la gente del pueblo de cada momento evolutivo.
Respecto a los temores de las
personas, lo podemos comprobar con las falsas muertes que se dan en la mayoría
de las historias: el/la protagonista medio muere y la única forma de despertar
es mediante un beso. Además, también muestran la sabiduría popular, a pesar de
no haber estudiado, a través de la simbología.
Mucha gente tiende a confundir con que
estos textos tienen moraleja y no es así, lo que sí es posible es que tengan
multitud de enseñanzas que se pueden adquirir según se vaya creciendo, como por
ejemplo que la vida nos enseña que muchas veces recibiremos ayuda de quien
menos nos lo esperamos, así como, que tenemos que ser humildes y aceptar las
ayudas que nos hagan.
Los cuentos folclóricos han pasado de
ser un recurso de entretenimiento para las familias y de contarse en un entorno
cercano, a estudiarse. El primero en hacerlo fue el ruso Vladimir Propp. Éste, en
los siglos XIX-XX, se empieza a interesar por los cuentos folclóricos rusos de
siempre.
Su tesis fue de los cuentos
folclóricos rusos, de lo que la gente le contaba. Recogió cuentos, cuaderno en
mano, que la gente recordaba. Descartó los textos de autor centrándose en los
folclóricos. Realizó la primera clasificación de los cuentos tradicionales
rusos, que aún se conserva:
§ Mitos: cuentan hazañas de héroes y
dioses. Y se pueden dividir en mitos, leyendas hagiográficas (santos) y
leyendas.
§ De animales: todos los personajes son
animales, no hay humanos. Dentro de este grupo están las fábulas: cuento muy
específico que por encima de su carácter de entretenimiento, está su carácter
moralizador; y los textos de animales: que no incluyen moraleja y sus
personajes adoptan roles de humanos, se trata de textos más infantiles.
§ De fórmula: una especie de cajón de
sastre donde se incluyen muchos tipos de cuentos:
o Cuentos mínimos: son ideales para
bebés. Algunos van acompañados de canciones, gestos...
o En los que siempre se repiten las
mismas palabras
o Cuentos acumulativos: que se usan
mucho en el primer ciclo de infantil. Tienen un argumento muy sencillo y el
cuerpo del cuento se compone al ir añadiendo personajes. Son ideales para hacer
pictocuentos.
§ De hadas y personajes mágicos: en
estos textos se mezclan a los seres humanos con animales que hablan.
Después de Propp, otros muchos
hicieron otras clasificaciones de los cuentos folclóricos. Destacan Gianni
Rodari con su clasificación pedagógica y Sara C. Bryant con su clasificación
funcional.
A lo largo de la historia han sido
muchos que se han dedicado a recopilar y adaptar muchos de estos textos
folclóricos, por los que gracias a ellos han llegado esos textos a nuestros
oídos.
En un principio, los cuentos
folclóricos no interesaban a la clase alta, sólo a la humilde. Sin embargo, el
rey de Francia (siglo XVIII) era un apasionado de ellos. Tanto que contaba con
un contador particular de historias, Charles Perrault. Después de oír tantos
cuentos por parte de su nodriza, decidió adaptarlos con una intención
moralizante hacia la corte francesa de su época, además, añadió en todos los
cuentos una moraleja en verso.
A la sombra de este aparecieron otros
recopiladores como Arman Berquin, quien publicó un cuento llamado “El lobo
blanco”, cuyo origen está inspirado en la mitología greco-latina.
Tras ella destaca Madame Leprince de
Beaumont, autora de “almacén de cuentos”, pero más conocida por haber
recopilado la historia de “La Bella y la Bestia”.
Llegando el siglo XIX, aparece en
Alemania el romanticismo que esta influenciado por el egocentrismo y el
nacionalismo.
De esta época destacan los hermanos
Grimm, filólogos que querían salvar la lengua romana, por lo que se dedicaban a
escribir diccionarios. Su editora les propuso plasmar en papel las historias
folclóricas alemanas manteniendo las historias que el pueblo les decía, pero
dándoles un estilo literario. Cuando
sacan la 1ª se agota, por lo que deciden sacar una 2ª edición pero más
ampliada, también se agotó. Al darse cuenta de que la mayoría de sus compradores
eran niños, deciden sacar una 3ª edición, pero está vez adaptada para niños:
“Cuentos del niño y el hogar”.
Hoffman recogió historias folclóricas
y las publicó en el “Cascanueces y el rey de los ratones”.
Durante esa época, en España destacó
Cecilia Böhl de Faber bajo el nombre de Fernán Caballero, que, guiándose por su
intuición, se dedicó a recopilar textos populares infantiles, canciones de
comba, de corro…
Con la llegada del Realismo, aparece
Hans Christian Andersen que es el encargado de recopilar los textos folclóricos
más famosos, como por ejemplo “La Sirenita”, que fue tan famosa que se hizo una
escultura de ella en Copenhague. La mitad de sus cuentos son de creación propia
cargados de realismo, como “El patito feo”, “La cerillera” o “El soldadito de
plomo”. Y la otra mitad son adoptados
del folclore con intención “a su gusto personal”, por ejemplo “Reina de las
nievas”.
Llegando a finales del siglo XX, es
España podemos destacar una serie de nombres.
Saturnino Calleja, fue un editor que
se dedicó a publicar libros para niños y jóvenes. Eran libros paraliterarios
(moralizantes o didácticos) o adaptaciones de cientos folclóricos, para ello
seguía unas pautas editoriales, es decir, adaptaciones moralizantes, o
recortaba párrafos en los cuentos que no cabían y añadía en los que no había
suficiente texto.
El Padre Colomo uso los cuentos para
moralizar católicamente a los niños. Escribió, actualizó y adaptó cuentos. Fue
el inventor de convertir personajes paganos en católicos (por ejemplo, cambio
las hadas por los ángeles). Nombraba mucho al demonio a que llamaba Pedro
Botero y al infierno al que asigno el nombre de “las calderas”.
Por último no puedo olvidarme de la
simbología que estos textos conllevan.
Según Propp existe un Núcleo Familiar 1, el cual representa el
comienzo de la historia y, además, es el encargado de proteger a el/la
protagonista, es su hogar. Por algún motivo, los personajes deben de salir de
ese núcleo realizando así un viaje iniciático donde deberán superar una serie
de obstáculos que les llevarán al Núcleo
Familiar 2. Esta transición de Núcleo Familiar conlleva a una evolución de
la vida del personaje, empieza siendo un niño que pasa a ser adolescente
durante el recorrido iniciático, y que termina siendo adulto cuando llega al
segundo Núcleo Familiar.
Hablando de los roles, encontramos
siempre un protagonista, que será el referente de los niños. Éste es quien
realiza el viaje iniciático. Por otro lado están los antagonistas que,
generalmente, son los enemigos del protagonista al que quieren hacer daño. Por
último están el resto de personajes que van conformando el viaje iniciático del
protagonista, pueden ser amigos o enemigos. Estos últimos personajes se pueden
dividir en malos, que son quienes ayudaran al protagonista a madurar, a que sea
más astuto, etc., gracias a ponerle pruebas de las que saldrá airoso; y en
buenos que son personajes humanos, animales o seres mágicos que serán quienes
le ayuden a superar los obstáculos de una manera inesperada.
Me gustaría comentar una experiencia que
tuve en el cole donde estuve de prácticas y que gracias a esta asignatura me he
dado cuenta que fue un gran error por parte de la profesora sacar una moraleja
de este cuento. Un día la tutora contó a los alumnos el cuento de los 3
cerditos porque iban a representar la obra en el colegio. La cosa es que cuando
terminó de contarlo les preguntó a los niños que les parecía el cuento, que
habían aprendido… preguntas típicas, en definitiva. Las contestaciones de los
niños fueron muy variadas, que si el ladrillo era más duro, el cerdito pequeño
era muy vago o que el lobo tenía mucha fuerza pero luego se había cansado, pero
la profesora en vez de aceptar esas respuestas como válidas lo que hizo fue
decirles, que lo que pasaba es que había dos cerditos que les gustaba mucho
jugar y poco trabajar y otro que prefería trabajar bien y luego si podía jugar,
vamos la idea que tiene todo el mundo de este cuento que encima no es correcta.
La idea correcta de este cuento es
que, el cerdito pequeño representa la infancia, época en la que los niños
muestran más interés por el juego y pasarlo bien que por trabajar, que en
realidad lo que tiene que hacer es jugar. El cerdito mediano refleja la adolescencia,
edad en la que saben cómo son las cosas pero tienen más interés por otras. Y el
cerdito mayor, simboliza a los adultos, los cuales saben que deben tener
paciencia e invertir tiempo en algo para que acabe siendo más duradero y
eficaz.
En mi opinión todos estos cuentos no
deberían perderse, pertenecen a nuestra historia y forman parte de cada uno de
nosotros de una manera o de otra. Porque todos tenemos ese cuento o esa peli
preferidas y que seguramente pertenezcan a este tipo de textos, el folclore.
Desde luego yo como futura maestra, pienso seguir colaborando con la
transmisión de estos textos porque los niños necesitan que les cuentes cuentos,
les gusta y algún día lo agradecerán, como lo agradezco yo ahora.
Bien.
ResponderEliminarNo has hablado de las manifestaciones folclóricas en verso y dramáticas... al menos de las cercanas a la infancia.
Debes hablar de qué uso tiene el conocimiento de la simbología de los cuentos para una maestra.
En las conclusiones finales, debes tener en cuenta también los otros géneros literarios.
Puedes usar otros blogs para inspirarte, pero no copies párrafos completos (http://literaturainfantil-quitaqueahoraleoyo.blogspot.com.es/2010/12/reflexion-del-bloque-ii-los-textos.html)